Grandes destrozos en el centro Soroka en Beer Sheva en la última andanada de misiles que causó decenas de heridos en el centro de Israel Leer Grandes destrozos en el centro Soroka en Beer Sheva en la última andanada de misiles que causó decenas de heridos en el centro de Israel Leer
Uno de los escenarios más temidos por Israel desde que comenzó la guerra con Irán se ha materializado hoy con el mayor ataque de Teherán de los últimos dos días. Uno de los misiles balísticos iraníes disparados en la andanada de la mañana de este jueves impactó de lleno en el Hospital Soroka, en la ciudad sureña de Beer Sheeva, provocando grandes destrozos y una ola de condenas y advertencias israelíes al régimen de Ali Jamenei. El ministro de Defensa, Israel Katz, envió un mensaje a quien llama «Hitler moderno»: «Un dictador dedicado al objetivo de la destrucción de Israel no puede seguir existiendo».
Las autoridades informaron de 72 heridos leves por el ataque que ha afectado de forma severa a la planta de Cirugía del principal hospital del sur de Israel. El departamento que sufrió el impacto directo había sido evacuado un día antes. Este hecho y que los que estaban en el edificio de seis plantas acudieron -o fueron trasladados- a los refugios tras las sirenas de alerta evitaron un escenario con decenas de muertos y heridos.
«Se trata de un edificio relativamente antiguo que fue evacuado anteriormente de sus departamentos. Varios edificios resultaron muy dañados como consecuencia de la explosión. Todo el personal se encontraba en zonas protegidas«, reaccionó el director del hospital, Shlomo Kodesh, destacando que el centro «se encuentra en emergencia y estaba preparado ante un ataque de este tipo». Asimismo, confirmó la evacuación de pacientes a hospitales cercanos mientras su centro solo funciona en casos de vida o muerte.
Cabe recordar que el sistema sanitario israelí se encuentra también en estado de emergencia ante los ataques de Irán que ha disparado alrededor de 450 misiles balísticos (en su inmensa mayoría neutralizados pero cerca de 30 impactaron en zonas urbanas) y más de 1.000 drones (ninguno impactó en tierra ya que se quedaron cortos o fueron interceptados) desde el inicio de la ofensiva a gran escala de Israel para golpear el plan nuclear y la infraestructura de misiles.
Al menos tres hospitales (Haifa, Tel Aviv y Petach Tikva) tienen amplias y protegidas instalaciones subterráneas mientras otros ocho centros médicos cuentan también con departamentos críticos blindados.
La mayoría de los más de 20 misiles balísticos disparados por Irán a primera hora de la mañana contra Israel fueron interceptados por el escudo defensivo. Los cuatro, con cientos de explosivos, que lograron sortear los sistemas Jetz II y Jetz III impactaron en dicho hospital y en edificios residenciales de ciudades céntricas como Tel Aviv, Holón y Ramat Gan con un balance de 271 heridos, entre ellos 6 en estado grave.
«Los tiranos terroristas de Irán dispararon misiles contra el Hospital Soroka en Beer Sheva y contra una población civil en el centro del país. Haremos pagar a los tiranos de Teherán», ha afirmado el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que ya en el centro sanitario declaró además de reiterar los dos objetivos de la ofensiva en Irán: «Aquí vemos la gran diferencia. Nosotros golpeamos objetivos militares y nucleares y ellos atacan un hospital donde la gente no puede levantarse y huir».
Los impactos en uno de los hospitales más importantes del país y una zona de residencias y oficinas en Ramat Gan, al lado de Tel Aviv, llevaron a Katz, a apuntar, de nuevo, a Jamenei: «Desde las profundidades del búnker, el cobarde dictador iraní ordena disparar de forma intencionada contra hospitales y edificios residenciales en Israel». Asimismo, anunció que su ejército intensificará los ataques contra «objetivos estratégicos y gubernamentales en Teherán para eliminar las amenazas al Estado de Israel y socavar el régimen de los ayatolás».
En el lugar del impacto en Holón, Katz advirtió a Jamenei al que acusó de ordenar a los hospitales israelíes: «Un dictador que lleva desde hace décadas como bandera pública la destrucción de Israel y que crea proxis y hace todo para ello es algo terrible. Alguien que dedica todos los recursos de su pueblo para cumplirlo no puede seguir existiendo».
La Guardia Revolucionaria iraní afirma que el objetivo del ataque en Beer Sheva era una sede militar y de Inteligencia israelí cerca del hospital. Las autoridades iraníes niegan que sus ataques apunten a la población civil y denuncian que el ejército israelí atacó deliberadamente un hospital en Kermanshah (en el oeste del país) hace varios días. En uno de sus últimos mensajes, Jamenei indicó que su país debe «actuar con contundencia contra la entidad terrorista sionista».
Entre los dos ataques iraníes (a última hora de la noche y la primera por la mañana), Israel bombardeó el reactor nuclear no operativo de Arak en el centro de Irán tras emitir un aviso de evacuación a los habitantes en la zona. Con potencial de producir entre 8 y 10 kilogramos de plutonio, fuentes israelíes afirman que «el incumplimiento del acuerdo del 2015 de Irán que le obligaba a sellar la estructura permite al régimen iraní reactivarlo si da la orden». Según medios en Irán, dos proyectiles impactaron en una zona cercana a las instalaciones sin que hubiera informes de amenazas por radiación.
Entre las decenas de objetivos atacados por la Fuerza Aérea israelí en las últimas horas en Teherán y otras zonas, también se encuentra y no por primera vez la central nuclear de Natanz.
La Guardia Revolucionaria -poderoso ente armado, ideológico y económico- y el ejército de Irán afrontan las oleadas de ataques aéreos israelíes, que esta madrugada del viernes cumplen una semana, y se preparan ante la posibilidad de la intervención directa de Estados Unidos en la guerra. «Todas las opciones están abiertas», avisan en la República Islámica sobre su posible reacción contra el que llaman «Gran Satán» mientras a Israel le consideran «pequeño Satán».
Internacional // elmundo
