Tras la emisión del último programa de La familia de la tele el pasado miércoles, una de sus presentadoras, Inés Hernand, ha pedido disculpas y ha hecho balance del tiempo en que este espacio de entretenimiento de La 1 ha estado en parrilla, y que ha sido cancelado de manera fulminante por RTVE tras los bajos datos de audiencia.
«Después de seis semanas y media leyendo tantas palabras alrededor del formato, me apetecía compartir con vosotros y con vosotras también las mías», ha comenzado explicándose Hernand a través de un mensaje publicado en sus redes sociales, donde ha mostrado algunos de los comentarios negativos recibidos hacia el programa. «Lo primero que me sale del corazón es deciros que de verdad, muchas gracias. Por otro lado, disculpas«, se ha sincerado.
A continuación, ha explicado por qué decidió en su momento embarcarse en este proyecto. «Soy una persona muy idealista, aunque no lo parezca, y en este mundo gris y en estos tiempos raros en los que vivimos, me gusta creer y confiar cuando percibo que alguien se atreve a hacer algo distinto. Con esta premisa accedí al formato y me encontré, como muchos de vosotros, con un programa que ha transitado bastantes escenarios que se alejaban, quizá, de una expectativa colectiva. Una expectativa con la que todos soñábamos, incluida yo. Una tele diversa, divertida, intergeneracional, didáctica, transgresora. Fantaseábamos también con estos personajes que todos conocemos de épocas anteriores, practicando otros contextos completamente distintos», ha comentado al referirse a algunos de los integrantes del desaparecido Sálvame de Telecinco.
«Desde luego, el reto era mayúsculo», prosigue Hernand. En su caso, indica, «cuando se me ofreció la oportunidad, no quería perderme, honestamente, esta posibilidad de cambio. Al igual que también hablaba yo con María (Patiño), con Belén (Esteban), con Chelo (García-Cortés), con Kiko (Matamoros), y pensaba firmemente en que no nos definen los formatos, sino la capacidad de adaptarnos y ofrecer nuevas versiones de nosotros mismos. Bueno, pues a partir de aquí, todos ya conocéis el plot twist. Creo que todos los proyectos colectivos tienen que tener respuestas colectivas, así que, de corazón, siento que no hayamos estado a la altura«, ha incidido.
En este punto, ha querido defenderse de las críticas, algunas de las cuales han venido desde los propios trabajadores del ente público. «Os garantizo que yo respeto muchísimo la televisión, y más la pública, especialmente en los tiempos que corren, así como toda la gente que trabaja en ella. Cada tarde, he hecho lo que estaba en mi mano como presentadora, por implicarme y adaptarme al máximo, manteniéndome profesional. Es lo mínimo que podía hacer. Evidentemente, no estaba sola. Durante todo este tiempo he estado rodeada de grandes profesionales que también se han sobrepuesto a los malos datos, a las críticas, a los volantazos, haciendo lo posible por no dar por perdido el programa cada día. A todos ellos, de corazón, gracias también», ha dicho.
No obstante, ha hecho autocrítica al indicar un aspecto que tiene «claro»: «Si algo no funciona en televisión, lo mejor que se puede hacer es cancelarlo«, ha reconocido.
En este sentido, ha asegurado que «no hay necesidad de televisar una agonía, porque al final no deja de ser como la vida misma. A veces las cosas salen bien, se aplaude, se celebra, y otras veces no. Y como esto va de evolucionar, de progresar y de que haya verdad, pues si no se está aprendiendo un producto que guste, o no se está cumpliendo las expectativas de la gente, se ha de poner un punto y final«, ha defendido.
Del mismo modo, Hernand también ha entrado a valorar por qué este espacio de entretenimiento no ha funcionado en La 1. «Entiendo que es una realidad que estamos ante un nuevo ciclo de temáticas de interés, de personajes, de circunstancias. Creo que los que nos dedicamos al entretenimiento tenemos también la responsabilidad de saber leer la sala y de preferir un contenido que guste. Así que, de nuevo, disculpas por no haber sabido dar con esa fórmula. Ojalá haya próximas veces y estoy de corazón muy agradecida siempre por vuestra complicidad», ha dicho.
Por último, Hernand se ha referido a su «corto paso por la prensa del corazón», que le ha servido para tener «otra perspectiva del oficio, muy interesante, por cierto. Así como también he podido palpar el clasismo hacia cierto tipo de contenidos«, ha zanjado.
Fue el pasado miércoles cuando La familia de la tele emitió su último programa tras la cancelación por parte de RTVE de este espacio de las tardes de La 1. María Patiño, Aitor Albizua e Inés Hernand formaban parte del equipo de esta apuesta que echó a andar el pasado 5 de mayo, en la que colaboraban también Belén Esteban y muchos otros integrantes del universo Sálvame, como Lydia Lozano, Kiko Matamoros, Víctor Sandoval, Carlota Corredera, Chelo García-Cortés, Javier de Hoyos o Marta Riesco.
«Siento que no hayamos estado a la altura», se ha sincerado una de las presentadoras del programa.
Tras la emisión del último programa de La familia de la tele el pasado miércoles, una de sus presentadoras, Inés Hernand, ha pedido disculpas y ha hecho balance del tiempo en que este espacio de entretenimiento de La 1 ha estado en parrilla, y que ha sido cancelado de manera fulminante por RTVE tras los bajos datos de audiencia.
«Después de seis semanas y media leyendo tantas palabras alrededor del formato, me apetecía compartir con vosotros y con vosotras también las mías», ha comenzado explicándose Hernand a través de un mensaje publicado en sus redes sociales, donde ha mostrado algunos de los comentarios negativos recibidos hacia el programa. «Lo primero que me sale del corazón es deciros que de verdad, muchas gracias. Por otro lado, disculpas«, se ha sincerado.
A continuación, ha explicado por qué decidió en su momento embarcarse en este proyecto. «Soy una persona muy idealista, aunque no lo parezca, y en este mundo gris y en estos tiempos raros en los que vivimos, me gusta creer y confiar cuando percibo que alguien se atreve a hacer algo distinto. Con esta premisa accedí al formato y me encontré, como muchos de vosotros, con un programa que ha transitado bastantes escenarios que se alejaban, quizá, de una expectativa colectiva. Una expectativa con la que todos soñábamos, incluida yo. Una tele diversa, divertida, intergeneracional, didáctica, transgresora. Fantaseábamos también con estos personajes que todos conocemos de épocas anteriores, practicando otros contextos completamente distintos», ha comentado al referirse a algunos de los integrantes del desaparecido Sálvame de Telecinco.
«Desde luego, el reto era mayúsculo», prosigue Hernand. En su caso, indica, «cuando se me ofreció la oportunidad, no quería perderme, honestamente, esta posibilidad de cambio. Al igual que también hablaba yo con María (Patiño), con Belén (Esteban), con Chelo (García-Cortés), con Kiko (Matamoros), y pensaba firmemente en que no nos definen los formatos, sino la capacidad de adaptarnos y ofrecer nuevas versiones de nosotros mismos. Bueno, pues a partir de aquí, todos ya conocéis el plot twist. Creo que todos los proyectos colectivos tienen que tener respuestas colectivas, así que, de corazón, siento que no hayamos estado a la altura«, ha incidido.
En este punto, ha querido defenderse de las críticas, algunas de las cuales han venido desde los propios trabajadores del ente público. «Os garantizo que yo respeto muchísimo la televisión, y más la pública, especialmente en los tiempos que corren, así como toda la gente que trabaja en ella. Cada tarde, he hecho lo que estaba en mi mano como presentadora, por implicarme y adaptarme al máximo, manteniéndome profesional. Es lo mínimo que podía hacer. Evidentemente, no estaba sola. Durante todo este tiempo he estado rodeada de grandes profesionales que también se han sobrepuesto a los malos datos, a las críticas, a los volantazos, haciendo lo posible por no dar por perdido el programa cada día. A todos ellos, de corazón, gracias también», ha dicho.
No obstante, ha hecho autocrítica al indicar un aspecto que tiene «claro»: «Si algo no funciona en televisión, lo mejor que se puede hacer es cancelarlo«, ha reconocido.
En este sentido, ha asegurado que «no hay necesidad de televisar una agonía, porque al final no deja de ser como la vida misma. A veces las cosas salen bien, se aplaude, se celebra, y otras veces no. Y como esto va de evolucionar, de progresar y de que haya verdad, pues si no se está aprendiendo un producto que guste, o no se está cumpliendo las expectativas de la gente, se ha de poner un punto y final«, ha defendido.
Del mismo modo, Hernand también ha entrado a valorar por qué este espacio de entretenimiento no ha funcionado en La 1. «Entiendo que es una realidad que estamos ante un nuevo ciclo de temáticas de interés, de personajes, de circunstancias. Creo que los que nos dedicamos al entretenimiento tenemos también la responsabilidad de saber leer la sala y de preferir un contenido que guste. Así que, de nuevo, disculpas por no haber sabido dar con esa fórmula. Ojalá haya próximas veces y estoy de corazón muy agradecida siempre por vuestra complicidad», ha dicho.
Por último, Hernand se ha referido a su «corto paso por la prensa del corazón», que le ha servido para tener «otra perspectiva del oficio, muy interesante, por cierto. Así como también he podido palpar el clasismo hacia cierto tipo de contenidos«, ha zanjado.
Fue el pasado miércoles cuando La familia de la tele emitió su último programa tras la cancelación por parte de RTVE de este espacio de las tardes de La 1. María Patiño, Aitor Albizua e Inés Hernand formaban parte del equipo de esta apuesta que echó a andar el pasado 5 de mayo, en la que colaboraban también Belén Esteban y muchos otros integrantes del universo Sálvame, como Lydia Lozano, Kiko Matamoros, Víctor Sandoval, Carlota Corredera, Chelo García-Cortés, Javier de Hoyos o Marta Riesco.
20MINUTOS.ES – Televisión