Teherán había prometido una respuesta «sin límites» al ataque contra sus militantes y científicos nucleares Leer Teherán había prometido una respuesta «sin límites» al ataque contra sus militantes y científicos nucleares Leer
«Una declaración de guerra», así calificó el ministro de exteriores iraní, Abbas Araghchi, los ataques israelíes contra nueve ciudades -incluida Teherán- que han causado la muerte de 78 personas y conmocionado a todo el país. La cúpula del régimen iraní, desde el líder supremo a las poderosas fuerzas militares de la Guardia Revolucionaria, se pronunció sobre el ataque, prometiendo responder con dureza y «sin límites». En el bombardeo murieron al menos tres altos comandantes de esta rama militar -entre ellos el comandante en jefe, Hossein Salami-, así como seis científicos nucleares. Parafraseando a su predecesor, el nuevo comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria, Mohammad Pakpour, advirtió que «las puertas del infierno pronto se abrirán para los sionistas». «Hasta ahora no habíamos querido abrir el camino a la guerra, pero el ejército de la República Islámica no tolerará la agresión de estos inmundos asesinos de niños ni el derramamiento de sangre inocente de nuestros compatriotas. Le dará a (el primer ministro israelí, Benjamín) Netanyahu una amarga lección», declaró la Guardia Revolucionaria en un comunicado, asegurando que Israel ha cruzado todas las líneas rojas.
Por su parte, el ayatolá Ali Jamenei publicó un mensaje en hebreo en su cuenta de la red social X, prometiendo un «destino amargo y doloroso» para Israel. «El régimen israelí debe esperar un duro castigo. La poderosa mano de las fuerzas armadas iraníes no los dejará ir. Varios comandantes y científicos fueron asesinados, sus sucesores reanudarán sus funciones de inmediato», aseguró.
Asimismo, Irán culpó también a Estados Unidos del bombardeo, pese a que Washington retiró a parte de su personal no esencial de varios países de la región y aseguró que se trata de un ataque «unilateral» en el que no han participado. «Las acciones agresivas del régimen israelí contra Irán no habrían ocurrido sin la coordinación y el permiso de Estados Unidos. Por lo tanto, el Gobierno estadounidense, como principal apoyo, es responsable de las peligrosas consecuencias de esta aventura», señaló el Ministerio de Exteriores en un comunicado.
En un comunicado poco después del ataque, el presidente estadounidense, Donald Trump, instó a Irán a aceptar su propuesta de acuerdo nuclear -que contempla suspender el enriquecimiento de uranio- «para salvar lo que una vez se conoció como el Imperio iraní». «Ya ha habido mucha muerte y destrucción, pero aún hay tiempo para poner fin a esta masacre, porque los próximos ataques planeados aún son más brutales», amenazó Trump. El líder republicano aludió a un ultimátum que le dio a Irán para lograr una postura común en las negociaciones. «Irán debe llegar a un acuerdo, antes de que no quede nada», advirtió. Por su parte, Teherán suspendió la retoma de las conversaciones nucleares con Washington, previstas para este domingo en Omán, tras el ataque israelí, según anunció la agencia estatal iraní, citando fuentes del gobierno.
Si bien Teherán no ha anunciado cuándo responderá al ataque, el ejército israelí informó del lanzamiento de 100 drones desde Irán y del inicio de una operación para interceptarlos fuera de sus fronteras. Las autoridades de Jordania hicieron sonar las sirenas y declararon que sus defensas aéreas han interceptado ya varios misiles y drones que entraron en su espacio aéreo, según informó la emisora Al Arabiya. Israel, por su parte, aseguró haber interceptado drones en el espacio aéreo saudí.
Por el momento, se desconoce el alcance total del ataque israelí y cómo ha afectado a las instalaciones nucleares iraníes, expuestas ahora a varios peligros como fugas radioactivas, explosiones y contaminación medioambiental. El director del organismo atómico de la ONU (OIEA) -entidad que monitorea los programas nucleares de los países miembros-, Rafael Grossi, aseguró que están en contacto con las autoridades iraníes para evaluar la situación de sus instalaciones. «También estamos en contacto con nuestros inspectores en el país», aseguró Grossi, tras confirmar que una de las principales instalaciones del país, en Natanz, en el centro, se encuentra entre los objetivos atacados esta madrugada.
Por su parte, el régimen iraní aseguró que el ataque israelí justifica su programa de enriquecimiento de uranio y el desarrollo de misiles. «No se debe hablar con un régimen tan depredador excepto con el lenguaje del poder», aseguró el Gobierno. «El mundo ahora comprende mejor la insistencia de Irán en el derecho al enriquecimiento, la tecnología nuclear y la potencia de misiles», concluyó.
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